Personal de las FFAA hizo control de los locales de votación

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La medida fue adoptada por primera vez en 1941 debido a los constantes conatos, discusiones y aglomeraciones que se producían en los locales de sufragio.

Esta madruga personal de las fuerzas armadas tomó posesión de los recintos de votación de la comuna, los que deberán, como ya es tradición en este tipo de sucesos, reguardar que el proceso se lleve a cabo sin problemas.

La medida tradicionalmente es adoptada según lo estipulado en el artículo 18 de la Constitución Política de la República, la que mantiene a las Fuerzas Armadas como los encargados de los locales de votación y el resguardo público junto a Carabineros y la PDI. Mientras que la Ley Orgánica Constitucional 18.700 sobre Votaciones Populares y Escrutinios, en su artículo 112, exige que sean los ministerios del Interior y Seguridad Pública y de Defensa, quienes dicten “disposiciones para el resguardo del orden público, las que deberán publicarse en el Diario Oficial con no menos de cinco días de anterioridad a la elección o plebiscito”.

También indica que esas disposiciones “se anotarán en un Libro de Órdenes que llevará el jefe de las fuerzas de cada localidad, el cual estará a disposición de los candidatos, de sus apoderados y de los representantes de los partidos políticos, quienes podrán verificar personalmente el cumplimiento de las disposiciones y reclamar en cualquier momento ante dicho jefe de la falta de seguridades y garantías individuales”.

La medida fue adoptada debido a los constantes conatos, discusiones y aglomeraciones que se producían en los locales de sufragio. Debido a esto se creó la Ley 6.825, del Ministerio del Interior y firmada por el ex Presidente Pedro Aguirre Cerda, en la que se legisló que el Mandatario designara con anterioridad a la fecha de la elección un jefe de plaza, que podía ser del Ejército, la Armada, la Fuerza Aérea y Carabineros, que tenía que canalizar el orden público en las elecciones.

En la actualidad las FFAA son las encargadas de velar por el orden y el buen proceso al interior de los locales de votación, mientras que carabineros y la policía de investigaciones se encargan del orden a los afuera de los recintos de sufragio.